Estamos seguros de que, al mencionar los conceptos “plantas” y “espinas”, lo primero que se te viene a la cabeza es el cactus. No obstante, mientras que en este caso surgen como un método de ahorro de agua, existen numerosos tipos de espinas, y cada una de ellas cuentan con sus propias funciones. Si quieres saber más sobre este sistema de protección natural, no puedes perderte el nuevo post de Deco&Lemon. ¡Toma nota de esta característica!

Espinas en plantas, ¿qué significan en botánica?

Por todos es sabido que las espinas de las plantas son esa formación con la punta aguda que puede estar ramificada y tiene un tejido vascular, propiciando que su contenido en tejido de sostén sea muy alto. Por ello, son tan rígidas frente a otras estructuras con el mismo aspecto. Una vez que ya nos hemos acercado al concepto, surge la siguiente pregunta: ¿por qué unas plantas sí y otras no? Imagínate por un momento ser una especie vegetal y vivir en una región árida, donde destaca especialmente la inexistencia de agua. Aunque pueda llover algún que otro día, la sequía es un elemento imprescindible en la vida de las anteriores. En este sentido, la producción y mantenimiento de hojas genera un gran gasto de agua, algo que muchas especies de plantas no pueden permitirse. Por ello, mediante la evolución, dichos elementos comunes se han transformado en espinas. utilidad espinas plantas

¿Qué tipos de espinas existen en plantas?

Foliares. Tal y como hemos comentado anteriormente, son aquellas que se originaron de la transformación de las hojas, como es el caso de los cactus y las del género Berberis. Radicales. Han surgido mediante una modificación de la raíz, un proceso surgido a través de lignificación. Es decir, la lignina sustituye a la mayor parte del agua de la membrana celular, endureciéndola y aumentando su volumen. Son muy poco comunes. Caulinares. Son las espinas que surgen con la transformación de los tallos. También son conocidas como ramas reducidas.

Pero, ¿qué papel cumplen las espinas?

Aunque pienses que las espinas solamente cumplen con la función de protección frente a depredadores, lo cierto es que su importancia va más allá. En primer lugar, podríamos destacar su capacidad para reducir la transpiración. Al requerir de menos agua, carecen de estomas, dos células oclusivas que se encuentran en su epidermis y delimitan los gases del interior y el exterior. De este modo, se pierde menos líquido. Por otro lado, también es un sistema de protección contra el sol. Y es que las plantas que están completamente cubiertas por estos elementos disfrutan de más sombra. Esto depende, lógicamente, de la anatomía de las espinas. Por último, pero no menos importante, pueden recoger agua tanto si llueve como si es del rocío. Aquellas gotas presentes en las espinas serán absorbidas por los poros de la planta, permitiendo que estén hidratadas. Esperamos que nuestra información sobre las espinas te haya sido de utilidad. En Deco&Lemon somos unos grandes amantes de las plantas, motivo por el que te recomendamos añadirlas en tu hogar. ¡Adquiere una maravillosa especie a través de nuestro catálogo!