¿Dónde ubicar la mesa de estudio en el dormitorio infantil?
Un problema con el que se topan muchos padres es la fácil distracción que muestran sus hijos a la hora de estudiar. Todos sabemos que los más peques están diseñados para jugar, motivo por el que es totalmente normal que pierdan la concentración ante estímulos que evoquen su impulsividad y ganas de diversión. Pero, aunque no lo creas, la decoración puede ser un elemento crucial para reforzar ese interés por el estudio y el aprendizaje. ¿Cómo? No te pierdas el nuevo post de Deco&Lemon. ¡En él te enseñaremos cómo puede beneficiar un correcto dormitorio infantil!
Organización del dormitorio juvenil, ¿Qué tener en cuenta?
Es primordial que mostremos cierta estructura y orden en la zona de estudio del niño. Por ello, es recomendable delimitar esta área de trabajo de forma que quede separada de la zona de juego. Por otro lado, es aconsejable que todo esté perfecto orden, ya sea en cajones, estanterías u otros espacios de almacenaje. Este acto fomentará la concentración y evitará distracciones.Mesa de estudio, ¿Qué consideraciones tener?
Una de las recomendaciones a la hora de elegir una mesa de estudio para el dormitorio infantil está relacionada con su correcta distribución. Por ello, debes tener en cuenta el espacio disponible. Respecto a la distribución, los expertos recomiendan que nunca se sitúe de forma que quede una pared justo enfrente del niño, ya que es una situación que favorece la sensación de vulnerabilidad. En este sentido, se recomienda que la mesa esté colocada frontalmente a la puerta de entrada de la habitación, con el fin de controlar lo que sucede sin que pueda ser una distracción. Si el mobiliario no te lo permite, escoge un cuadro que de perspectiva a la estancia. Cómo no, una mesa de estudio frente a una ventana no es una buena opción, ya que favoreceremos que el niño disponga de multitud de estímulos cambiantes ante los que distraerse. Por supuesto, a todo lo anterior debemos sumarle que la mesa de estudio siempre debe ofrecer comodidad. De no ser así, nunca será un rincón apreciado y encima perjudicará la salud de los más peques.